Estos tokens financiarían un programa de «subvenciones especiales» destinado a fomentar el crecimiento en Arbitrum, la capa 2 de Ethereum que desechó su token de gobernanza ARB la semana pasada. Pero los titulares de ARB no tendrían voz sobre quién o cómo la Fundación Arbitrum asigna la suma de casi mil millones de dólares, según la propuesta. AIP-1.