Trate los datos de su empresa como un nómada digital

Trate los datos de su empresa como un nómada digital

COMENTARIO

La necesidad pospandemia de “conexión en cualquier lugar” está impulsando no solo las actividades sin fronteras, sino también el aumento de los nómadas digitales. Sorprendentemente, ambos hombres enfrentan problemas similares.

Considere que las empresas internacionales y los trabajadores independientes de su ubicación deben estar preparados para viajar, seguir las reglas locales y traer solo lo esencial. Para un nómada digital, eso podría significar una computadora portátil, un puñado de aplicaciones esenciales y una VPN confiable. Para una empresa y sus datos, se trata de bases de datos multinube, cifrado sólido y una postura de confianza cero. En cualquier caso, el exceso de equipaje sólo te ralentiza y aumenta tu vulnerabilidad. Y, en ambos casos, No seguir las reglas puede generar problemas legales..

De hecho, las empresas hoy caminan por la cuerda floja cuando se trata de datos. Sus ecosistemas de información debe ser adaptable a diversos entornosnavegando por regulaciones más estrictas, mayores requisitos de seguridad y reglas de datos complejas.

Exploremos cómo las empresas pueden convertirse en nómadas de datos al equilibrar el cumplimiento, la seguridad y la agilidad, mientras ven el mundo sin meterse en problemas.

Desde bases de operaciones hasta expediciones globales

Dominar los viajes es crucial para los nómadas digitales y de datos. Al igual que los viajeros inteligentes que cruzan fronteras internacionales, las empresas deben gestionar un panorama de datos variado, especialmente con el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR) de la Unión Europea que actúa como un «pasaporte de control» estricto para la información. Por lo tanto, comprender lo que se requiere es esencial para mover datos del punto A al punto B cumpliendo con la ley.

Las empresas primero deben mapear sus datos (sus activos digitales) para saber qué poseen, cómo están regulados y dónde se almacenan. Al igual que los nómadas con una base de operaciones, muchos están adoptando un enfoque de nube híbrida. Esta estrategia de casa y fuera combina la infraestructura local con servicios de nube pública, brindando flexibilidad, beneficios de costos y resiliencia. Garantiza que los datos residan en ubicaciones jurisdiccionales apropiadas y al mismo tiempo permite un alcance global.

Sin embargo, mover datos entre regiones específicas causa complicaciones adicionales, particularmente entre Europa y Estados Unidos. Los “requisitos de visa” que rigen las transferencias de datos aceptables entre estas dos superpotencias han estado evolucionando durante años, siendo el marco de privacidad de datos UE-EE.UU. el último intento de racionalizar los datos transfronterizos. Las organizaciones aún necesitan obtener los “permisos de viaje” adecuados combinando varios enfoques. Esto podría implicar retener datos confidenciales en sistemas basados ​​en la UE, utilizar cláusulas contractuales estándar para transferencias a los EE. UU. o aplicar nuevos principios marco cuando corresponda. Sin embargo, dada la accidentada historia de acuerdos anteriores como Privacy Shield y Safe Harbor, las empresas deberían estar atentas a este espacio.

Otra forma de viajar sin toparse con las autoridades es la conectividad aislada. La última configuración de Nube Distribuida de Google ejemplifica este equilibrio, con su dispositivo aislado en aire que permite a los usuarios acceder a aplicaciones en la nube sin comprometer la seguridad de los datos: una combinación de comodidad en el hogar y flexibilidad de viaje para los datos empresariales.

La caja de herramientas de seguridad de un nómada

Pero moverse de un lugar a otro expone a los nómadas digitales y de datos a riesgos de seguridad. Así como los trabajadores de todo el mundo deben permanecer atentos a los carteristas y las estafas, las empresas deben tener cuidado con los malos actores, una preocupación creciente ante el aumento de las cargas de trabajo distribuidas y los piratas informáticos a nivel mundial.

La buena noticia es que las empresas pueden y deben contraatacar. El cifrado de extremo a extremo actúa como un candado irrompible y protege la información en cada paso del camino. La autenticación multifactor sirve como pasaporte biométrico, garantizando que sólo el personal autorizado tenga acceso. Las auditorías de seguridad periódicas señalan riesgos potenciales, al igual que las advertencias de viaje. Y, al adoptar el almacenamiento distribuido, las empresas evitan poner todos los huevos en la misma canasta, lo que reduce el impacto de una sola infracción.

La adopción de una arquitectura Zero Trust, similar a un cuidadoso detalle de seguridad, garantiza aún más la verificación independientemente del origen. Esta mentalidad de “no confiar en nada, verificar siempre” trata cada red como hostil y revisa cada solicitud de acceso, lo que reduce el riesgo de filtraciones de datos y acceso no autorizado.

Lecciones del camino

Ya he superado esa metáfora, pero los paralelismos entre los nómadas digitales y los datos empresariales son demasiado marcados para ignorarlos, y los desafíos seguirán evolucionando.

Las tecnologías emergentes, como la informática de punta y la inteligencia artificial, crearán nuevos destinos para que nuestros datos exploren. Y no espere que la regulación se ralentice, dando forma aún más a los requisitos de viajes digitales. Esto requiere que los líderes de TI escuchen y piensen en el recorrido de los datos puerta a puerta.

Las empresas más exitosas serán aquellas que puedan transformar los posibles problemas de datos en oportunidades de crecimiento e innovación. Al combinar agilidad y cumplimiento, seguridad y accesibilidad, tratarán sus datos como un viajero bien preparado, listo para cualquier aventura.

La lección de nuestros primos nómadas digitales es clara: haz la maleta ligera, haz la maleta bien.