Las directrices para los modelos de embriones cultivados en laboratorio son lo suficientemente estrictas como para cumplir con los estándares éticos y fortalecerán la confianza en la ciencia.

Las directrices para los modelos de embriones cultivados en laboratorio son lo suficientemente estrictas como para cumplir con los estándares éticos y fortalecerán la confianza en la ciencia.

En julio, investigadores del Reino Unido publicaron un código de prácticas sobre cómo se deben utilizar las células madre humanas para imitar el desarrollo de embriones en el laboratorio. este codigo Este informe fue desarrollado por un comité de trabajo compuesto por 13 biólogos del desarrollo, especialistas en células madre, abogados, especialistas en reglamentación y bioéticos, del cual yo fui presidente. Es el primero de su tipo en el mundo.

Estas directrices son absolutamente necesarias debido a las similitudes entre los modelos de embriones humanos y los embriones naturales. Algunos países, incluidos Australia y los Países Bajos, han propuesto que estos modelos estén regulados por las mismas leyes que restringen la investigación con embriones humanos. Pero en el Reino Unido, así como en Estados Unidos, Francia y otros países, los embriones modelo siguen siendo legal y biológicamente distintos de los embriones naturales.

Los modelos de embriones humanos, cultivados en el laboratorio a partir de células madre, son estructuras tridimensionales que replican varios aspectos de las primeras semanas del desarrollo humano, lo que permite a los investigadores estudiar los primeros acontecimientos del embarazo y el aborto espontáneo, y analizar el impacto de las drogas y las toxinas en el crecimiento. Durante la última década, los investigadores han encontrado formas de replicar más fielmente el desarrollo humano y diseñar modelos embrionarios más eficientes. Pero estos avances han despertado preocupaciones en los medios y entre el público sobre el posible uso de modelos de embriones de células madre para crear un organismo viable, planteando cuestiones éticas.

Diseñamos nuestro código de ética para asegurar al público que la investigación en el Reino Unido sobre modelos de células madre embrionarias se lleva a cabo de manera ética y transparente, y para garantizar que los científicos sepan lo que pueden (y no pueden) hacer con estos modelos. Por ejemplo, el código prohíbe a los investigadores transferir un modelo embrionario humano al útero de una persona para intentar inducir un embarazo. También establece que ningún investigador puede generar o utilizar un modelo sin la aprobación de un comité de supervisión compuesto por científicos, abogados, especialistas en bioética y miembros del público británicos. El comité, que será elegido según un proceso aún por determinar, se constituirá a finales de año.

Algunos investigadores se preguntan si las directrices deberían alinearse más con las leyes de otros países relativas a la investigación con embriones humanos. Muchas leyes establecen que los embriones humanos naturales no pueden cultivarse más allá de 14 días, justo antes de que se forme una estructura llamada raya primitiva, que marca el comienzo del eje cabeza-cola del embrión. Por el contrario, nuestras directrices no establecen explícitamente cuánto tiempo se puede mantener en cultivo cada modelo de embrión. Además, el código no hace referencia a ninguna “línea roja” de desarrollo relacionada con la línea primitiva. Y las directrices, aunque recomendadas, no son jurídicamente vinculantes. Pero, al evitar poner límites demasiado simplificados a la ley, podemos asegurar que el código de práctica sea adecuado para su propósito en los años venideros.

Es difícil aplicar límites uniformes a todos los tipos de modelos de embriones. Todos los embriones naturales se desarrollan de la misma manera, aproximadamente al mismo ritmo, mientras que los modelos de embriones basados ​​en células madre vienen en muchas formas y tamaños, y cada uno comienza y termina en el equivalente de una etapa diferente de desarrollo. Es difícil especificar un único punto para todos los modelos en el que debería cesar la búsqueda.

Más bien, nuestro código establece que los científicos deben definir y justificar ante el comité de supervisión el punto final de los modelos que pretenden utilizar, y cultivarlos durante el menor período de tiempo posible para responder a su pregunta de investigación. Las decisiones sobre los límites apropiados serán tomadas por el Comité de Supervisión caso por caso, teniendo en cuenta las características embrionarias estudiadas, el valor científico de la investigación y la posibilidad de responder preguntas utilizando modelos alternativos.

Por ejemplo, a un investigador que utilice un modelo que carece de las células necesarias para formar la placenta (sin las cuales un embrión no es viable) se le podría permitir continuar su experimento incluso después de que se haya formado una estructura parecida a la línea primitiva. Un investigador que utilice un modelo que contenga estas células podría no hacerlo.

Quizás los modelos de embriones más controvertidos sean aquellos que replican aspectos del desarrollo del embrión humano durante la semana siguiente a la formación de la raya primitiva. Estos modelos son la única herramienta disponible que permite visualizar esta etapa de desarrollo. Hasta ahora, los investigadores finalizaron los experimentos en un momento equivalente al día 14, en lugar de ver cuánto tiempo podrían desarrollar los modelos. Según nuestro código, todos los criterios de evaluación propuestos deben tener un objetivo científico válido. No basta con ver hasta dónde evolucionarán los modelos.

Entiendo que la gente quiera legislar sobre investigaciones relacionadas con el desarrollo humano. Pero cambiar la ley puede llevar tiempo. El Código de prácticas puede revisarse y modificarse según sea necesario, lo cual es esencial para permitir el progreso en un campo en rápida evolución. Dado que las directrices reflejan la voz del público y se han beneficiado de las contribuciones de una amplia gama de partes interesadas, confío en que los investigadores e instituciones del Reino Unido las seguirán. En otros países, diferentes consideraciones éticas, jurídicas y científicas pueden requerir un enfoque diferente.

Aunque el código está diseñado para el Reino Unido, podría ser útil para otros países y algunos aspectos del mismo podrían usarse para desarrollar directrices para otras jurisdicciones. Los principios comunes en un campo tan vanguardista ayudan a generar confianza pública. Espero que los investigadores del Reino Unido y de otros lugares vean el mérito de nuestros esfuerzos.

Conflicto de intereses

RS fue presidente del Grupo de Trabajo sobre Directrices de Gobernanza del Modelo de Embriones de Células Madre; un proyecto liderado por Cambridge Reproduction and Progress Educational Trust.