Valve reflexiona sobre la demanda que podría haber acabado con la empresa

Valve reflexiona sobre la demanda que podría haber acabado con la empresa

Esta semana se cumple el vigésimo aniversario de Half-Life 2, el shooter en primera persona insignia de Valve y posiblemente uno de los mejores juegos del género. Para celebrar la ocasión, Valve lanzó un documental de casi dos horas sobre la creación del juego, que narra cómo el futuro de Valve se vio amenazado por una demanda presentada por su antiguo editor, Vivendi.

Según lo informado por jugador de PC Y Nivel 80La historia detrás del juicio comienza aproximadamente una hora después del documental, y esta historia entra y sale del trasfondo del desarrollo de Half-Life 2 a lo largo de los siguientes 43 minutos de la película. En el centro de la demanda estaba la afirmación de Valve de que Vivendi estaba distribuyendo Counter-Strike en cibercafés de Corea del Sur sin la autorización de la propia Valve.

En respuesta a la demanda de Valve haciendo valer sus derechos, Vivendi respondió con múltiples contrademandas contra el primero, así como contra el director de operaciones de Valve, Scott Lynch, y el cofundador Gabe Newell. La batalla legal agotó tanto los recursos de Valve que la empresa estuvo a punto de quebrar. Newell también reveló que también estaba casi personalmente en quiebra y tuvo que poner su casa en venta para poder seguir luchando.

Un acuerdo con otro editor le dio a Valve un respiro que tanto necesitaba. Pero el punto de inflexión en el caso llegó cuando Vivendi revisó millones de páginas de correos electrónicos durante la fase de descubrimiento, todos en coreano. Resulta que Valve tuvo un pasante de verano, un coreano nativo al que se hace referencia solo por su nombre, Andrew, que encontró la prueba irrefutable de lo proverbial en todas estas publicaciones. Durante un intercambio entre dos vicepresidentes de Vivendi, uno de ellos indicó que había «destruido estos documentos de Valve como usted solicitó».

«Presenté muchas demandas durante mucho tiempo», recuerda Karl Quackenbush, abogado general de Valve. «Nunca había visto algo así. Nunca. Tal vez hubo cierta destrucción de documentos que no se pudo probar, pero fue como, ‘Estamos hablando de ello por escrito’. Nunca había visto esto antes. En ese momento, el juez Zilly dijo: «Todos los hechos ahora son consistentes con Valve». [settlement]cuánto tendrás que pagar y cuáles son los daños».

Valve salió de esa demanda con un acuerdo que devolvió su propiedad intelectual a Vivendi y garantizó su futuro como editor y distribuidor para otros editores a través de Steam. Es posible que este brillante futuro nunca hubiera sucedido sin Andrew. Pero el documental nunca menciona si a Andrew le ofrecieron un trabajo en Valve, lo que habría sido una recompensa adecuada por salvar la empresa.